Todo lo demás, el juego,la táctica,la crítica a la impotencia del equipo en la segunda parte queda en un segundo plano por el enésimo atraco arbitral perpetrado en Nervión. Un penalty clamoroso cometido sobre Juan Cala en las postrimerías de la primera parte que hubiera supuesto el 2 a 2 antes del descanso y,por tanto, comenzar un nuevo partido. Lo indecente de todo esto es que Álvarez Izquierdo lo ve pero no le da la gana de pitarlo. Casualmente, el linier de fondo tampoco vio la acción como si ocurriera en el derby.
Pero si la acción del árbitro es nefasta, la que realiza el linier de fondo en la segunda parte roza lo delictivo porque pitar fuera de juego en la acción de Medel, en un país serio,conllevaría la expulsión del estamento arbitral. Esa acción es intolerable a nivel profesional y mas con lo que se jugaba el Sevilla en este partido.
El juego pasa a un segundo plano porque el Sevilla ya no es el equipo superior que pasaba por encima de cuestiones arbitrales. El Sevilla se ha vuelto terrenal y como el resto de los mortales cualquier error arbitral y mas si son dos suponen la derrota.
Mas si cabe ante esta Real Sociedad que fue superior no en las ocasiones generadas pero si en el manejo táctico del partido, sobre todo a raíz del golpe de fortuna en el empate ocasionado por el autogol de Rakitic. Supo plantarse en pocos metros,con las líneas muy juntas y sabiendo aprovechar el robo de balón y la velocidad de sus mediapuntas, Griezman y Vela, así como la calidad en la salida de balón de Illarra y Xabi Prieto.
El Sevilla nunca supo dominar el partido y no me refiero a las ocasiones creadas sino a manejar defensivamente al equipo rival minimizando sus cualidades. Pese a contar con Kondogbia y Medel en el centro,el.equipo estaba muy estirado, con las líneas muy separadas,dándole al rival el espacio que tanto necesita para hacer daño.
Ni el equipo,ni el árbitro, ni las individualidades ayudaron en nada a ganar el partido.Rakitic,Negredo,Navas, las principales estrellas de este equipo no estuvieron a la altura de lo que requería el partido, al igual que lo que viene ocurriendo en el transcurso de la temporada. Jugadores con nombre, pagados con salarios de crack cuyo rendimiento solo da para estar novenos en la liga española.
El Sevilla perdió el enésimo tren con destino a Europa una vez mas por errores propios y por el ROBO perpetrado por Álvarez Izquierdo y su linier. Tres puntos ayer,un punto del At. Madrid, dos puntos del derby harían 6, lo que nos daría la séptima plaza.
Eso es un hecho objetivo al igual que la temporada del Sevilla es tremendamente mediocre, merced fundamentalmente a la nefasta temporada fuera de casa.
El Sevilla y el sevillismo se quedan sin la esperanza europea. Ayer fue por un ladrón encarnado en árbitro pero la temporada es para que Monchi y José María del Nido se lo hagan mirar porque ya son dos temporadas fracasadas.
El sevillismo está triste y desencantado, mas aun con decisiones absolutamente erróneas como poner la música a toda leche con la canción camino al infierno de AC-DC para ¿ evitar? que la afición exprese su descontento una vez acabado el choque. Decisión desafortunada y ya está tardando el club en pedir disculpas o depurar responsabilidades.
Ojalá acabe la temporada pronto de la mejor forma posible y el Consejo haga examen de conciencia porque lo necesita. El sevillismo puede consentir que no se acceda a Europa por lo que sea pero en su casa y mas si ha acabado el partido hay que aceptar la crítica y dejarse de tonterias de canciones que jamás se han puesto en el campo del Sevilla.
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