El Sevilla FC volvió a perder un nuevo partido en San Sebastían y encadena 8 jornadas sin conocer la dulce sensación de una victoria. Cualquier tiempo pasado fue mejor que dice el refrán y al Sevilla le viene que ni pintado dicho argumento.
Si el cambio de entrenador nos había insuflado una nueva perspectiva de cambio, la derrota de ayer deja bien a las claras que Marcelino no era el único culpable y que la situación es mas dañina de lo que parece puesto que nos encontramos a sólo tres puntos de puestos de descenso.
El análisis de todo estos es bastante claro y sencillo. El equipo se ha descapitalizado en calidad competitiva que es a la postre la que da victorias. Tenemos nombres muy bonitos de pronunciar, todos internacionales y protagonistas en sus respectivos equipos : Medel, Rakitic, Trochowski, Navas, Negredo... pero todos ellos no conforman lo que es un EQUIPO, así como mayúsculas. La palabra equipo engloba muchas cosas: sacrificio, ambición, pundonor, ir todos a una en definitiva cosa de la que adolece el actual Sevilla que pulula por los campos de fútbol como un equipo sin ALMA, sin carácter, sin tensión competitiva en definitiva.
CUALQUIER equipo nos hace un descosido en el centro del campo y la defensa porque el GRUPO no funciona. No hay ayudas, no hay buena colocación, no hay presión al contrario, no desbordamos, no centramos bien ni aunque nos majen a palos. Ayer sin ir mas lejos, un jovenzuelo llamado Rubén Pardo, futbolista de gran proyección que se sitúa en la misma órbita futbolística que Xabi Alonso nos da un meneo de muy señor mio. Junto a el, dos gladiadores llamados Markel Bergara y Aramburu. Estos tres futbolistas le vuelven a ganar a un centro del campo roto por la bisoñez de Campaña, la anarquía de Reyes y Trochoski ... dejesmolo mejor lo de este internacional alemán que parece que juega pachangas en lugar de partidos de fútbol. Rakitic sería la alternativa pero el croata no parece el croata que deslumbrara el año pasado sino mas bien el hermano malo que se pasea por los campos sin pena ni gloria.
Que decir de la defensa, de la cual rescato de la quema a Cala por ser nuevo y ser su primer partido. Un Coke, que es una decepción absoluta tanto en defensa como en ataque, un Fazio que es una hermanita de la caridad que va a fallo-gol por partido y Fernando Navarro que tiene unas limitaciones técnicas impresionantes.
Ahí radica el meollo y los males del Sevilla, no sin decir ni comentar la nefasta temporada de Negredo, Navas , Perotti o Kanoute.
Michel tiene la difícil tarea de hacer del Sevilla en estos 16 partidos un equipo, no una banda de futbolistas sin alma que pasean el sacrosanto escudo del Sevilla FC.
Como aficionado sólo me queda animar los 90 minutos durante el partido y mostrar mi mas y rotunda repulsa a la planificación de la temporada llevada a cabo por José María del Nido y Monchi, máximos responsables para lo bueno pero también para lo malo de esta institución que va a la deriva.
Que alguien eche el freno de mano a este TITANIC que se nos hunde ante el asombro de una afición atónita debido a las expectativas del equipo al inicio de la temporada.
Mas cantera, mas testiculina, mas darle la pelota al compañero y no pelotazos sin sentido como damos partido si y partido también.
Que vuelva el fútbol y sobre todo una VICTORIA. Como es el fútbol y la vida, antes no eramos felices en las victorias porque no jugábamos bien, ahora clamamos y rogamos por una MISERA victoria redentora.
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